Los líderes de Rusia, Irán y Turquía se reunieron en Teherán en el marco del proceso de Astaná sobre la resolución del conflicto en Siria.
La amenaza a la estabilidad en Siria se mantendrá mientras tengan presencia grupos extremistas en los territorios no controlados por el Gobierno, a lo que en gran medida aporta la política de los países occidentales en la región, liderados por Estados Unidos, ha declarado este martes el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Hablando durante una reunión tripartita de los líderes de Rusia, Irán y Turquía en Teherán, el mandatario ruso expuso que “hay que acabar para siempre con la presencia en Siria del Estado Islámico y otros grupos extremistas”.
“Quisiera recalcar que la situación en los territorios no controlados por las autoridades sirias es particularmente preocupante. De allí proceden las amenazas reales del crimen, el extremismo y el separatismo. A eso contribuye en gran medida la línea destructiva de los países occidentales, encabezados por EE.UU., que busca lograr el eventual desmembramiento del Estado sirio. Por lo tanto, es deseable que se tomen medidas adicionales en nuestro formato para estabilizar estas zonas y devolverlas al control del Gobierno legítimo de Siria”,
señaló Putin.
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El líder ruso mencionó que la situación es complicada en la región nororiental de Siria, donde “con apoyo de una gran cantidad de países, se están emprendiendo esfuerzos para violar la soberanía del Estado sirio, perdurar la ilegal presencia militar extranjera, y fomentar sentimientos separatistas”.
Al respecto, advirtió que los países participantes del proceso de Astaná seguirán vigilando atentamente e impidiendo el uso por las fuerzas externas de los grupos armados que actúan en el suelo sirio para “la solución de sus propias tareas geopolíticas egoístas”.
“La parte rusa confirmó su postura del principio de que la región al este del Éufrates debe ser devuelta al control del Gobierno legítimo de Siria”, enfatizó.
El futuro de Siria debe ser decidido por los propios sirios
Además, el líder ruso consideró “eficaz” el trabajo coordinado realizado por las tres naciones participantes del formato en la ayuda a Siria para normalizar la situación en el país, conseguir la recuperación económica, el regreso de personas desplazadas a sus hogares y el acceso a la ayuda humanitaria.
En este contexto, hizo un llamado a un mayor involucramiento de organizaciones internacionales en dicho proceso, “sin politización ni precondiciones”.
El presidente remarcó que una de las tareas para un futuro próximo será tomar medidas concretas para promover un diálogo inclusivo en Siria.
“El futuro de Siria debe ser decidido por los propios sirios, sin que se impongan recetas o modelos prefabricados desde el exterior”,
sostuvo Putin.
“En conclusión, quisiera expresar confianza de que nuestras negociaciones serán útiles y productivas, y que sus resultados servirán para el reforzamiento de la seguridad no solo en Siria sino en la región entera de Oriente Medio”.
El jefe de Estado ruso indicó que está previsto que la próxima cumbre de los presidentes de Rusia, Turquía e Irán en formato de Astaná se celebrará en su país, y que será un placer ver a sus homólogos en Rusia.
Es necesario que estas fuerzas abandonen la región
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, declaró al comienzo de las conversaciones que la presencia ilegal de las tropas estadounidenses en Siria es un factor desestabilizador para la región.
“Es necesario que las fuerzas de este país abandonen la región, incluida Siria, lo más rápido posible”, afirmó Raisi. El líder persa acusó a Washington de saquear recursos sirios, incluido el petróleo, y condenó los ataques aéreos de Israel contra el territorio sirio.
Con información de RT
