Los usuarios de la avenida Manaure aseguran que se adecuan a los estacionamientos porque “no hay de otra” para poder realizar las compras.
Al consultar los comerciantes de la avenida Manaure de Coro coinciden que, aún se están adaptando a la normativa del corredor vial implementado desde el 16 de mayo.
Aunque el gobierno municipal de Miranda sostuvo una reunión con una representación del sector comercial y flexibilizó los horarios de dicho corredor vial, los comerciantes manifiestan que se pueden evaluar otras alternativas.
“Mejoraron las ventas”
En este sentido, Apóstolo Kakkaros representante de una zapatería acentúo:
“La flexibilización del horario ha sido positiva, las ventas han mejorado. Sin embargo, creo que la medida debe es aplicar para las paradas de transporte que, los vehículos respeten esas zonas”.
“No es suficiente”
Asimismo, el comerciante Musa Mosthafa destacó:
“Con la flexibilización ha funcionado un poco, pero 10 minutos que es lo permitido para que un usuario se estacione no es suficiente para hacer una compra. Mientras lo estacionamientos no sean seguros, no serán utilizados, porque ya hay personas que le han robado”.
“Recuperan ventas”
El encargado de la tienda Marjories, José Bustillos puntualizó:
“Las ventas se están recuperando porque la gente por lo menos se estaciona 10 minutos y pregunta los precios. Anteriormente era más estricto y hay que estar consciente que, el cliente cuando va a comprar primero consulta precios y luego decide donde adquirir la mercancía; y con esta medida del corredor vial la gente se abstiene un poco a venir a la Manaure”.
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Usuarios se adecuan a los estacionamientos
Entre tanto, los usuarios de la avenida Manaure aseguran que se adecuan a los estacionamientos porque “no hay de otra” para poder realizar las compras.
En ello, Jordan Guerrero argumenta:
“Si el flujo vehicular fuera más amplio, sería bueno los estacionamientos. Además, si vamos a la realidad la mayoría de los dueños de los establecimientos no los usan y uno tiene que hacerlo porque solo permiten 10 minutos en la avenida”.
De igual forma, Rey Rodríguez resalta:
“Es un proceso engorroso, soy comerciante y comprar al mayor se hace difícil, porque hay que hacer varios viajes de donde esté el local hasta el estacionamiento que haya dejado el carro”.
Marcos Perozo añade:
“No queda otra que usar los estacionamiento, pero uno deja su carro con desconfianza y al momento de hacer las compras se tiene apuro y estrés, porque cuando se regrese al estacionamiento le falte algo al carrito”.
Foto Principal/Carlos García
